Sociedades Federadas

El Instituto Médico Valenciano (IMV) se fundó en marzo de 1841 por un grupo de médicos y farmacéuticos que según el artículo primero de sus Estatutos iniciales crearon “una corporación científica que tiene por objeto procurar los progresos de la ciencia médica, facilitar la mayor instrucción de sus profesores y contribuir a la unión, bienestar y decoro de la clase”.

A diferencia de otras asociaciones creadas en la misma época, el IMV continua su labor hasta final del siglo XIX y los más ilustres médicos valencianos de ese periodo son miembros del Instituto, se implican en su funcionamiento y publican sus trabajos en el Boletín que se publica de manera continuada hasta 1896. En 1898, por iniciativa, entre otros, del IMV se crea el Colegio de Médicos de Valencia lo que hizo que algunos socios del IMV dudaran de la conveniencia de pertenecer o no a ambas corporaciones. Lo cierto, es que con mayor o menor intensidad la vida, sobre todo científica, del IMV continuó. Desde 1940 hasta 1977 algunas funciones del IMV fueron asumidas por el Colegio, como demuestra que se siguiera convocando el Premio Roel creado en 1906 gracias al legado del médico asturiano Faustino García Roel.

En 1975 un grupo de profesionales interesados en fomentar los trabajos sobre la sanidad en sus distintos aspectos, solicitó al Colegio de Médicos la creación de una Sección de Estudios Sanitarios del País Valenciano dentro del ámbito del Instituto, lo que permitió la revitalización del IMV. El 24 de enero de 1978 fue elegida, por primera vez desde los años treinta, una nueva junta directiva que presidida por Vicente López Merino y se creó una nueva estructura para que estuvieran representados los socios de Alicante y Castellón, así aparecieron las juntas de las mancomunidades de las comarcas vinculadas a Alicante, Castellón y Valencia que tenían, además, representantes en la junta directiva del IMV.

Desde los inicios en el IMV los socios se habían organizado por secciones, a las iniciales: Medicina, Cirugía y Farmacia y ciencias auxiliares, se añadió aún en el siglo XIX la de Higiene y epidemiología. A partir de los primeros años del siglo XX y como consecuencia del desarrollo de las especialidades médicas, se fueron creado secciones dedicadas a algunas de ellas, las cuales fueron en muchos casos el embrión de las sociedades científicas. La primera fue la de Oftalmología en 1917 presidida por Tomas Blanco Bandebrande, la actual Sociedad Oftalmológica de la Comunidad Valenciana se considera continuadora de esta sección. En 1924 se creó la de Obstetricia y Ginecología presidida por Miguel Martí Pastor, en 1926 la de Pediatría presidida por Dámaso Rodrigo Pérez, en 1927 las de Cancerología, Psiquiatría y Neurología, Otorrinolaringología, Electrorradiología, Odontología que luego se llamó Estomatología, por último en 1929 se creo la sección de Tuberculosis.

En la nueva época iniciada en 1975, los componentes de las juntas directivas de IMV se preocuparon por incluir a las sociedades regionales, luego autonómicas, en la estructura del IMV. Aparecen referencias a ello en distintas actas desde abril de 1977, y de facto las sociedades científicas que voluntariamente lo deciden se van federando en el IMV. Incluso en la década de los 80 se crean secciones de endocrinología y dermatología, probablemente porque aún no se habían constituido las sociedades autonómicas. No hay constancia de la actividad de estas secciones, pero son prueba del interés de la junta directiva del IMV por promover la participación diferenciada de las distintas especialidades.

El 18 de septiembre de 1997 la junta directiva del IMV acuerda reformar los estatutos del IMV para incluir en ellos a la Federación de Sociedades Científicas (FSSCC) y el 16 de octubre del 1997 se aprueba la modificación, que ratifica la asamblea general en diciembre de 1998, con lo que la federación pasa a convertirse en un órgano colegiado dentro del propio IMV. En la actualidad y después de la reforma de estatutos de 2006 aparece recogido en el artículo 33 de los Estatutos y en el 6 y 7 del Reglamento. En diciembre de 2011 la federación aprobó su propio reglamento y en la actualidad hay 62 sociedades federadas.

La Federación facilita la interrelación y coordinación de todas las sociedades impulsando proyectos comunes y asesorando en la toma de decisiones. Siendo proactivos a la hora de plantear documentos, manifiestos y posicionamientos en temas transversales de interés común e innovadores.

El IMV ha actuado desde la creación de la Federación de SSCC como representante de las sociedades ante la Administración Sanitaria y ante la sociedad.

La Federación se reúne como mínimo dos veces al año.